La formación en gestión de servidores cloud cambió completamente mi perspectiva profesional. Durante ocho meses aprendí desde configuraciones básicas hasta implementaciones complejas de infraestructura distribuida. Lo que más valoro es el enfoque práctico que recibí.

Llegué con conocimientos básicos de redes y terminé manejando arquitecturas complejas de microservicios. El programa me preparó para enfrentar desafíos reales que encuentro diariamente en mi trabajo actual como administrador de sistemas.

El enfoque integral del programa me permitió entender no solo las herramientas técnicas, sino también la filosofía detrás de la gestión moderna de infraestructura. Aprendí a pensar estratégicamente sobre escalabilidad y eficiencia operativa.